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¡Conoce tu perfil como inversor!

25/07/2018

En este nuevo post, te guiamos para identificar cuál es tu perfil de inversión y así estar bien informado antes de tomar cualquier decisión.

 

¿Por qué es importante conocer tu perfil?

La determinación de tu propio perfil como inversor constituye un buen punto de partida para la toma de decisiones de inversión, puesto que te ayudará a determinar qué productos financieros encajan con tus necesidades y preferencias.

Debes ser consciente de que el intermediario financiero sólo tiene la obligación de analizar tus objetivos de inversión y preferencias de asunción de riesgo cuando te presta los servicios financieros de asesoramiento profesional o gestión de carteras. En el resto de casos, el intermediario se limitará a analizar tus conocimientos y experiencia (tu capacidad para comprender la naturaleza y riesgos del producto ofertado) y sólo te advertirá, cuando sea necesario, de tu ausencia de conocimientos para comprender de forma adecuada el producto ofertado, sin entrar a valorar el ajuste del mismo a tu perfil de riesgo u objetivos de inversión.

Al margen de lo anterior, el intermediario tiene la obligación de informarte adecuadamente sobre las características y riesgos de los productos que vayas a adquirir. Por tanto, es imprescindible que entiendas la información que la entidad te transmite y que seas consciente del nivel de riesgo que asumes en cada producto que vayas a contratar, antes de hacerlo.

Asumir un riesgo inadecuado puede provocarte más de un disgusto.

 

¿Cómo puedes determinar tú mismo tu perfil de inversión?

Para determinar tu perfil como inversor, debes conocer las respuestas a las siguientes preguntas:

  • ¿Cuál es mi punto de partida? Se trata de definir tu situación financiera actual: ingresos, gastos, deudas…
  • ¿Cuáles son mis metas concretas? Es imprescindible determinar cuáles son tus objetivos financieros, de un modo realista y concreto. Por ejemplo, “alcanzar la independencia financiera” puede ser un objetivo demasiado difuso y poco operativo. Sin embargo, “ahorrar 10.000 euros en tres años para hacer un curso en el extranjero” sí es un objetivo concreto: incluye plazo, cuantía y finalidad.
  • ¿De cuánto tiempo dispongo para alcanzar el objetivo? Esta respuesta depende de la anterior y te ayudará a determinar el tipo de productos que pueden interesarte.
  • ¿Que nivel de riesgo estoy dispuesto a asumir en el camino? Esta cuestión tiene un componente objetivo (tu capacidad financiera, lo que puedes permitirte perder) y otro subjetivo (tus conocimientos financieros, tu forma de ser y cómo influye en tu tolerancia al riesgo).

 

Además de determinar tu apetencia o aversión al riesgo, es importante que cada inversor reflexione para estar seguro de que la misma, es decir, el riesgo que está dispuesto a asumir en sus inversiones, es compatible con su situación financiera y con su capacidad para asumir pérdidas si estas se producen.