Sigue siendo común el uso del cheque como instrumento de pago en determinadas transacciones. En particular en aquellas en las que el importe a entregar o recibir es elevado, como en el caso de la compraventa de un piso.
Al utilizar un cheque damos una orden al banco para que pague una determinada cantidad de dinero a otra persona, sin necesidad de tener que recurrir al dinero físico.
Para que sea válido, deberá contener la palabra “cheque”, la cantidad que quieres pagar, el nombre de la entidad donde tienes el dinero y tu firma. Si quieres que lo cobre una persona concreta, deberás poner su nombre en el cheque. Si no lo haces, lo disfrutará quien lo tenga en su poder.
2010 © Plan de Educación Financiera. CNMV y Banco de España Política de privacidad
-->