Cashback o cómo sacar dinero en el supermercado

Sacar dinero del cajero es una acción que todos tenemos que hacer en algún momento.

Uno suele salir con el tiempo justo y… ¡oh!, no dispones de  dinero en efectivo. Tenemos que ponernos a buscar rápidamente un cajero automático. 

Ahora bien, existe una opción más de obtener efectivo, aún poco conocida en España, pero habitual en otros países, llamada en inglés cashback: devolución del dinero.

En el Reino Unido, por ejemplo, es muy popular. En los supermercados, a la clásica pregunta que te hacen cuando vas a pagar, “¿quiere usted una bolsa?”, se añade  otra: “¿desea dinero?” Y es que el cliente puede sumar al ticket de compra una cantidad que le será entregada en efectivo. Por ejemplo, si se lleva artículos por valor de 30 euros pero quiere otros 50 en efectivo, solicita al cajero/a que se lo incluya en la factura que pagará con su tarjeta y listo. Y no sólo en supermercados, también es posible en gasolineras, restaurantes y pubs.

Por ello, en determinadas ocasiones, cuando nos urge tener efectivo y estamos realizando el pago de una compra, el cashback es un sistema muy práctico para los consumidores.

También es destacable que no se cobra comisión al cliente, aunque puede ocurrir que el establecimiento exija un gasto mínimo para retirar efectivo o exista un importe máximo de efectivo a entregar. 

En España, esta operación puede realizarse- hasta la fecha- bajándonos una aplicación en el móvil. 

Por cierto, no  se debe confundir con otra práctica que algunas plataformas online realizan bajo el mismo o similar nombre, consistente en devolver un porcentaje de la compra realizada en estas webs, bien a través de transferencia a tu banco o a una cuenta asociada a la plataforma en cuestión, para que lo gastes en la misma página.